jueves, 31 de octubre de 2013

Culturas, religiones, historia, magia... ¡Jerusalem! Un poco de historia

Llegó el momento... Tantas fotos vistas por Internet, historias leídas sobre otros viajeros, historias oídas desde que era pequeño... Y ahora estoy ahí, ¡en la famosa Jerusalem!

Me resulta complicado escribir el post de Jerusalem. Por un lado me podría limitar a contar lo que he visto, lo que he sentido... Pero por lo que ha vivido esta ciudad, sería injusto no contar algo de su historia y de su presente, tanto a nivel de conquistas como religioso, aunque hay tanto para contar, que también sería injusto dejarse algo en el tintero. En fin... intentaré no enrollarme demasiado y que haya de todo un poco.

Al principio intenté escribir un sólo post con la historia, mis experiencias, los sitios visitados... Pero me quedaba muuuyy largo, así que contaré en este primer post un poco la historia que he aprendido de Jerusalem, y luego escribiré otros con mis sensaciones sobre lo que he visitado.

AVISO: Ahora viene un poco de historia de Jerusalem, que sé que algunos os dan pereza estas cosillas, os aviso por si acaso... :-D

Aunque la más antigua historia de Jerusalem se remonta aproximadamente a la época del año 4.000 adC, es en el siglo XI adC, con la conquista de la ciudad por parte del rey David, del que Abraham es antepasado, cuando empieza a tener más emoción el tema...jeje. Fue el rey David quien comenzó a construir el Primer Templo, el más importante lugar de culto y social para la población judía. Tras la muerte de David, su hijo Salomón extendió la ciudad y sobre todo, finalizó la construcción del Primer Templo. En los siguientes años, la ciudad fue pasando por diferentes manos, ya veis que esto ya se convierte en costumbre... Contando con la presencia de asirios, babilonios, los cuales destruyeron el Primer Templo y obligaron al exilio judío, después llegaron los persas, que permitieron a los judíos volver y reconstruir lo que se conoció como el Segundo Templo, para después pasar a manos de Alejandro Magno.

Os dejo una foto con la maqueta de Jerusalem en tiempos del Segundo Templo. El Segundo Templo estaría a la derecha de la imagen, ese muro grande que se ve, las primeras casas en la parte inferior serían la primera ciudad de Jerusalem fundada por el rey David, y el resto cómo se fue ampliando la ciudad.


Tras el dominio de Alejandro Magno, llega otra época de gran importancia para Jerusalem, la conquista por parte del Imperio Romano. Durante la conquista romana, la ciudad de Jerusalem estuvo gobernada por Herodes, de religión judía, pero con muy buenas relaciones con Roma, y conocido entre otras cosas por la construcción de espléndidas ciudades con edificios magníficos (Cesárea, Masada...), y claro, Jerusalem no podía ser menos. Se encargó de la ampliación del Segundo Templo para el culto de los judíos. Sin embargo, éste no duró mucho, ya que debido a una revuelta judía en el año 66 dC, reprimida por los romanos, éstos últimos, como represalia, destruyeron el Segundo Templo, dejando solo una pared en pie.


Efectivamente, el más que conocido Muro de las Lamentaciones, lugar más sagrado para la religión judía. ¿Y por qué ese nombre tan tristón? Los romanos, muy simpáticos ellos, dejaron este muro en pie tras destruir el Segundo Templo, para que así los judíos siempre se acordasen al ver el muro de lo que les había pasado por haberse revelado, y así se les quitasen las ganas de volver a hacerlo, y tener que lamentarlo, por ello, Muro de las Lamentaciones. Curioso, ¿verdad?

Tras la eṕoca romana, llegó el turno de los bizantinos, también de gran importancia para Jerusalem por su influencia cristiana, con la construcción de iglesias, y sobre todo, con la construcción de la Iglesia del Santo Sepulcro, construida sobre el lugar que se considera que Jesús fue crucificado, donde se posó su cuerpo al morir y donde fue sepultado. Por todo ello, se trata del lugar más sagrado para la religión cristiana.



Después de los bizantinos, era la hora de los musulmanes, también con gran influencia en lo que hoy es Jerusalem, ya que construyeron el edificio llamado la Cúpula de la Roca, sobre lo que se conoce como la Explanada de las Mezquitas para los musulmanes, o Monte del Templo para judíos y cristianos, ya que la Cúpula de la Roca se levantó exactamente sobre el lugar donde habían estado tanto el Primer como el Segundo Templo, evidentemente, al ladito del Muro de las Lamentaciones. ¿Que no os suena eso de la Cúpula de la Roca?... Seguro que con la foto os aclaráis.


Este lugar es de gran importancia sagrada tanto para judíos como para musulmanes. Ambos porque consideran que fue ahí, en la roca que se encuentra en el centro de la cúpula, donde Abraham, padre del judaísmo y representante de los creyentes para cristinos y musulmanes, estuvo a punto de matar a su hijo por órdenes de Yahvé. Y por si no fuese poco importante ya con eso, para los judíos esa roca significa la primera piedra para construir el mundo, ya que formaba parte del sancto sanctorum (lugar sagrado del templo judío sólo accesible al sumo sacerdote), y según sus creencias, será el lugar donde se levante el Tercer Templo cuando llegue el Mesías.

Y para liar aún más la cosa, como para los judíos la explanada de las mezquitas es un lugar profanado y en el que se situó el sancto sanctorum del Primer y Segundo Templo, tienen prohibida su entrada en este espacio para así evitar entrar por error en la que fuese la zona del sancto sanctorum, exclusivamente reservada aún hoy en día para el sumo sacerdote. Y además, aunque la Cúpula de la Roca tenga forma de mezquita, simplemente es una construcción para dar culto a la famosa piedra de Abraham. Para la oración, en la misma explanada, construyeron la mezquita Al-Aqsa, sobre el lugar en el que se cree que Mahoma ascendió a los cielos en su caballo alado para reunirse con Dios. Esta mezquita es la más grande de Jerusalem, y el lugar más sagrado para los musulmanes tras la Meca y Medina.



Perdonad que me haya enrollado tanto con el tema de la explanada de las mezquitas, o Monte de los Templos, pero es la zona más emblemática de Jerusalem y la que tiene mayor historia y significado.

Tras la época de los musulmanes, la ciudad fue pasando por manos de los cruzados, mamelucos, otomanos (turcos), los cuales construyeron la actual muralla que rodea la ciudad vieja y fue el periodo más largo de conquista de la ciudad, hasta que en 1917, durante la 1ª Guerra Mundial, llegaron los británicos y se hicieron con la ciudad.

Durante el dominio británico, la población judía no estaba del todo conforme con que su ciudad más sagrada no estuviese en sus manos, aunque la 2ª Guerra Mundial, hizo que judíos y británicos se uniesen en contra de los nazis, calmando en cierta medida estas crispaciones. Pero tras la 2ª Guerra Mundial, se intensificaron las tensiones entre británicos y judíos. Esto hizo que en 1947 la ONU estableciese una división del país entre judíos y musulmanes, lo que ya os conté en el primer post sobre Israel, dejando Jerusalem como territorio internacional, definiendo lo que se conoce como la Línea Verde, para establecer los límites. Los judíos (israelíes) estaban conformes con la división, y los musulmanes (palestinos) no, por lo que comenzó la guerra civil, dando como resultado una división de Jerusalem, la parte vieja para musulmanes y los barrios más modernos fuera de la ciudad amurallada para judíos. Durante este dominio musulmán de la ciudad vieja, arrasaron con todo lo relacionado con los judíos, y prohibieron a éstos su acceso a sus lugares más sagrados, como el Muro de las Lamentaciones. Durante esta época, incluso había una valla que establecía la división en Jerusalem. Esto fue así hasta la Guerra de los Seís Días en 1967 entre israelíes y y la coalición árabe formada por Egipto, Jordania, Irak y Siria. Tras esta guerra, los israelíes aumentaron su territorio, incluyendo entre otros la ciudad vieja, y estableciendo los límites entre el territorio israelí y el territorio musulman, conocido como Cisjordania. Esta división al final ha sido parecida a la que quiso establecer la ONU en 1947.

Aunque tras las Guerra de los Seís Días se han producido algunos otros hecho de relevancia, por no liar más la cosa, la situación es esta en cuanto a Jerusalem. La ciudad está unificada, existiendo la parte más moderna y la ciudad vieja, que mantiene aún los muralla levantada en el período otomano.



A pesar de que tras la Guerra de los Seis Días, los israelíes se hicieron con la ciudad vieja, otorgaron dentro de ella un barrio a los musulmanes, incluyendo en su dominio la explanada de las mezquitas. De forma que actualmente la ciudad vieja de Jerusalem está dividida en 4 barrios, el barrio musulmán (el más grande y más poblado), el barrio judío (prácticamente nuevo debido a su destrucción por parte de los musulmanes entres 1948 y 1967, incluye el Muro de las Lamentaciones), el barrio cristiano (incluye la Iglesia del Santo Sepulcro) y el barrio armenio. ¿Armenio? ¿Y esos de dónde han salido? :-D Son un pueblo cristiano que a lo largo de la historia de Jerusalem, digamos que han permanecido más o menos neutrales, y se fueron ganando la simpatía de la gente, hasta el punto de concederles un barrio propio en la ciudad vieja.

A nivel histórico esto es lo que muuuy resumidamente se puede decir de Jerusalem. Por lo que véis, se trata de una ciudad de alto nivel sagrado para las principales religiones del mundo. Para los cristianos porque fue aquí donde Jesús pasó la última etapa de su vida, donde estaba el templo en el que impartía sus enseñanzas, donde vivió junto a sus discípulos, donde fue crucificado y donde resucitó. Para los judíos, porque como ya he comentado, en Jerusalem se encuentra la piedra en la que Abraham, padre del judaísmo, estuvo a punto de matar a su hijo, donde se han levantado los Templos más importantes de la historia del judaísmo, donde creen que aparecerá el Mesías (Monte de los Olivos), momento en el que se construirá el Tercer Templo. Y para los musulmanes en Jerusalem es donde se supone que Mahoma ascendió a los cielos para reunirse con Dios.

Aunque parezca mentira, me ha costado horrores ser capaz de poner en este poco espacio lo que he podido aprender de la historia de Jerusalem. Hasta hace poco todo lo relacionado con la historia no me interesaba demasiado, pero cuando estás en un lugar así, con tantas experiencias vividas, tan significativas en el mundo entero, con tantas culturas, puedes sentir esta historia dentro de ti, como si te metieses en un cuento en el que como espectador vas viendo mientras paseas por la ciudad de Jerusalem las diferentes partes de la historia que han ido sucediendo.

Y es que Jerusalem es como un parque de atracciones, de religiones, de culturas, en el que simplemente estar paseando te permite en cuestión de unos pasos estar en un mundo cristiano, tranquilo, con gente cautelosa; pasar a un mundo musulmán, movimiento por todas partes, locura, olores; pasar a un mundo judío, edificios nuevos, orden, comunidades ortodoxas de todos los estilos, con sombreros altos, bajos, trenzas; y pasar a un mundo armenio, calles de cuento, artesanía, privacidad. Todo ello junto, pero a la vez claramente separado.

 Barrio armenio

Hasta aquí el post, los próximos ya os iré contando más sobre la vida turística en Jerusalem, que también da para mucho. Espero que aún sigáis algunos despiertos después de la chapa de historia, jeje.

Como punto final del post, os dejo un cuadro famoso en Israel y que me encantó al verlo. Las religiones, aunque personalmente no comparto sus metodologías y sus interpretaciones, logran que de alguna manera mucha gente esté unida, se puede sentir la conexión entre ellos. Los motivos y las formas de estar conectados serán mejores o peores, pero sacando la parte positiva, al menos hay cierta preocupación por ámbitos más espirituales de uno mismo, y no sólo superficiales. Este cuadro para mí refleja muy bien esta conexión.



¡Un abrazo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario